Cervecería DNI - Barcelona, Barcelona

Emma Soler

Servicio pésimo, nada más llegar pedimos cafés y zumos y sin mirarnos a la cara nos dice que la cafetera está rota y tampoco tiene zumos, nos dice que nos vayamos a otro lado y que viene gente ahora en una mesita de la terraza. Sin duda no volveremos.

Sara Guaitoli

En lo posible, evitad este bar. El lugar aparenta poco turístico y barato, pero no os dejéis engañar: por una caña te cobran 3€. Además, a los 30min te echan, sin ni siquiera haber alguien interesado en sentarse en la mesa. Nosotros aún no nos habíamos acabado las cervezas y se quería llevar nuestros vasos medio llenos. Un trato muy desagradable y precios abusivos por lo poco que ofrece este bar.

Núria Romero

Mis 7 amigas estaban tomando una cerveza mientras hacían tiempo antes de ir a cenar. El restaurante estaba muy cerca de este bar así que yo he llegado a las 21:58 (la reserva en el restaurante era a las diez). Me he sentado para esperar a que pagaran y el dueño del bar ha venido a preguntarme qué quería tomar a lo que le he contestado que nada, gracias, que ya nos íbamos. Su respuesta ha sido que en su bar quien se sentaba tenía que consumir y que me levantara.

A continuación mis amigas han ido a pagar y una cucaracha ha pasado por la barra.

No tiene sentido ir. Es insalubre, desagrable, el local no es acogedor ni estético y el dueño es un impresentable.

rut bon

!!!NO VAYÁIS!!! Precios abusivos y trato lamentable.
Hemos decidido tomar unas cervezas porque parecía un bar de barrio con precios asequibles, pero la experiencia ha sido HORRIBLE.
Primeramente, el camarero, con apariencia entrañable (era un señor bastante mayor), nos cobra 3 € por una copa de cerveza, un precio muy abusivo. Por si no fuera poco, pasados 20 min nos avisa que con una consumición por persona solo podíamos estar en la terraza durante 30 min. Sería comprensible que nos echara después de haber consumido si el local fuera un lugar frecuentado, pero éramos las únicas clientas. Después de un primer aviso, el señor vuelve con aires de superioridad a advertirnos que el tiempo se había acabado, aunque aún no habíamos acabado nuestra consumición. Finalmente, nos ha echado de malas maneras en cuanto ha visto que nuestras copas estaban vacías.
Para rematar, el lugar estava muy sucio con cajas y sillas mal puestas en un local minúsculo y mal cuidado.

Shen Peragón Zushi

PRECIOS ABUSIVOS, no me explico 3€ por una cerveza en un lugar tan descuidado (decidimos ir pensando que sería el típico bar de barrio barato).

Y no solo eso, TRATO PÉSIMO del camarero. Tras pedir unas cervezas y pasar unos minutos tomándolas, el camarero se ha acercado para decirnos que solo contábamos con 30 minutos por consumición (como si fuera algo de sentido común y sin antes habérnoslo comentado al pedir), cuando aún nos quedaba media copa y no había nadie que quisiera entrar o consumir en el bar. Aún bebiéndonos la birra con prisas, al pasar la media hora se nos vuelve a acercar el camarero con la intención de retirarnos las copas con aún con un culín por terminar. Estaba claro que íbamos a acabar en breves y aún así, le hemos tenido que pedir unos minutos para poder acabarlas. Luego no tardó en venir a limpiar la mesa y a echarnos del lugar con comentarios, que igual que el nombre del local, no eran graciosos y estaban totalmente fuera de lugar.

Cabe comentar que 10 minutos después de llegar, se sentaron un grupo de hombres en la mesa de al lado a quienes el camarero no dirigió palabra ni les comentó nada sobre la consumición de 30 minutos.

En fin, VERGONZOSO que una pague por una cerveza y no pueda tomársela en paz. NADA RECOMENDABLE!

Pau Gutiérrez Serrano

Básicamente nos han echado de la terraza, éramos 2 personas y al llevar 30 minutos sentados se acerca diciéndonos que tenemos que consumir más de malas maneras, cuando ni siquiera había gente esperando y son las 6 de la tarde, nos trae el datáfono y nos cobra 2,90€ por cada nestea, los cuales venían sucios. Obviamente nada recomendable, le hice saber lo que opinaba al respecto con respeto y no me dejó ni hablar.

Juan Huarte

Es tan feo el lugar que es casi pintoresco. Pequeño, sucio, cajones de cerveza tirados, te atiende un viejo malacara y tiene el nombre más feo que le podían poner. Muy recomendable

Jordi Cardero Navarro

LE TUVE QUE IR A COMPRAR EL PAN. Fuimos una vez a cenar. Pedimos unas cervezas, unos bocatas y nos dice que no le queda pan. Me dio un euro y me dijo que si queríamos bocatas fuéramos al super de al lado a comprar una barra de pan. Fui a buscar pan y el bocata estaba correcto. Sin duda alguna, un lugar distinto.