la textil collective / 303 audiophile bar - Barcelona, Barcelona

Andrea Núñez

Alitas crudas, pulled pork bun insipido y mal servicio.

Lamentablemente tuvimos una experiencia muy mala en este restaurante. Al llegar nos tomaron el pedido y luego nos dijeron que no podíamos comer en la barra por lo que teníamos que pedir en una mesa con algún otro mesero. La comida tardó lo normal porque había bastante gente pero fue de muy mala calidad. Pedimos las alitas BBQ y el bun de pulled pork. Las primeras nos vinieron crudas por dentro (lo grave que esto puede ser) y sin sabor, mientras que la carne del pulled pork estuvo seca e igual insípida. Yo pedí una cerveza con limón, o sea una clara, y me trajeron algo que no se parecía a una ya que sabía a cerveza con agua (al quejarnos nos dijeron que esa era su versión pero cuando la ordené nadie me informó). Decidimos no dar más de tres bocados a cada plato y devolver la comida en cocina expresando nuestra inconformidad, a lo que nadie respondió ni preguntó cómo podían remediar el error. Adicionalmente a todo esto, la respuesta que todos nos daban era "soy nuevo" y la persona responsable de caja finalmente no supo ni dar una disculpa y menos una opción de solución. Es claro que no hay procesos para estos casos y que deberían capacitar mejor a su personal.
Llegamos con hambre y teníamos expectativas, sin embargo, no lo recomendamos y tampoco volveremos.

Julio HC

Un sitio estupendo. La comida y la cerveza, la decoración, el personal... Un 10. Por ponerle una pega, la primera vez que entras es fácil ir un poco perdido porque el sitio es grande, tiene varios ambientes y nadie te recibe ni hay indicaciones. El restaurante es al fondo del todo, y no se sirve en mesa; se pide en caja y hay que acercarse a recoger la comida a la barra.

Santiago Lozano

De los lugares favoritos en la ciudad, tienes comida, bebida y luego un club de música en el sótano teniendo todo en un mismo sitio

El ambiente está súper cool, buena música con DJ y linda decoración

Marcel Pellicer

Restaurante con varios ambientes. Desde una semi hambugueseria, hasta un restaurante de platos y platillos Local muy atractivo ciertamente. Disponen de varias cervezas artesanales de calidad, los platos están bien presentados, con algunas salsas muy interesantes, el pan caliente siempre es un garantía, la carne muy buena. El servicio muy amable, pero son muy lentos, los platos escasos, muy caros, y 25 minutos para traerme una cerveza es excesivo. 50 € sin postre ni café y me tuve que ir a acabar de cenar a otro sitio con más hambre de la que había entrado. Eso sí, el local muy bien decorado..

Marcos Prieto

Bar de cervezas artesanales con muy buen ambiente y música agradable. Muy buenas la Punk in drublic y la Pequeña muerte

Eric Cabanillas

Un local bien decorado, pero por muy bonito que sea, si un sábado a las 14 está vacío en Barcelona es por algo...
Para que funcione tienen que darle un giro radical.

La comida "de calidad" era normal. Los precios son caros para la comida que te ofrecen.

Una hamburguesa pequeña doble, con poco sabor, básica sin más condimentos por más de 15€. Patatas a parte(6€). Fuimos al mediodía, igual la carta de noche cambia...

Apolo Flores

Es un gran lugar para venir a tomar cerveza y con amigos, es un lugar sorprendentemente muy grande y en el que casi seguro encontrarás espacio para estar, y digo casi seguro porque en viernes y fines de semana por la tarde se peta, y hay una discoteca adentro que generan mucho movimiento y unas colas enormes para pedir algo de beber, así que ya sabes… si vas a formarte para ordenar de una vez pide por todos los de la mesa.

La comida bien, probamos una papas fritas muy ricas que recomiendo para picar y luego le dimos a un Hotdog de zanahoria que fue una experiencia muy chistosa para el paladar, sabe rico, pero la mente me traicionaba buscando el sabor a Salchicha!

Laura Jiménez

El lugar es muy agradable y bonito y el personal muy atento. Fuimos porque vimos en su web que tenían restaurante en servicio de comidas (se podía reservar mesa desde la web) y la carta nos apeteció.
La sorpresa fue que al llegar y preguntar nos informaron que el restaurante solamente abría por la noche.
La carta del brewpub era algo corta y los precios, algo altos. De todas formas, decidimos probar.

Para acompañar un vacío por el que te cobran 27 euros, eché en falta algo de acompañamiento. No obstante, la carne estaba tierna y al punto. Personalmente hubiera preferido que el chimichurri se sirviera aparte, para que la carne tuviera más protagonismo ya que está hecha a la brasa.

El provolone no lo pediría de nuevo: se queda seco enseguida y aunque la presentación es bonita, es incómodo a la hora de comer porque cuesta servirlo dado que al enfriarse, se queda pegado a la olla y cuesta despegarlo.

Las cervezas y el personal, lo mejor.